Kamite: Rachel Rising #5

Rachel Rising es un cómic del cuál es difícil hablar, ya que es un cómic de apreciación gráfica. Es fijarnos en el movimiento de las moscas que caen cuanto chocan contra el vidrio, es apreciar la textura de la cabecera de madera de la cama en la que Rachel, ni viva mi muerta, yace dormida con marcas de muerte en su cuello mientras ve por debajo la cabeza del bovino que cuelga encima de su cama. Pero la historia sigue, Rachel despierta en casa de su tía esperando que todo hubiera sido un sueño, su tía y su perro la reciben para cenar, mientras aún intenta procesar que está muerta pero anda caminando por ahí. Mientras su tía termina la cena, llega Jet, su mejor amiga, a la que le relata lo que recuerda hasta el momento, el haber salido de la tumba, no recordar nada y apoyarse en el cuerpo que estaba enterrado junto a ella. Cuando la cena está lista Jet y Rachel entran para encontrarse con el Doctor Siemen, quien le dice que ella no es Rachel, que es Ma Malai, el Ángel de la Muerte. Finalmente, regresamos con Zoe, la niña misteriosa de números anteriores. Después del incendio, servicios sociales le busca una familia adoptiva, la cual no resulta ser cariñosa como uno esperaría. Zoe es amenazada por el padre que desea adoptarla. Zoe le advierte que tiene alguien que la está cuidando, lo que no es bien recibido y termina mal para una persona, al estilo elevador. Sin duda alguna, Rachel Rising es otra serie que vale la pena seguir al pendiente.